La gasometría arterial es una de esas pruebas que al principio parece complicada, pero en realidad sigue una lógica clara. Si entiendes el equilibrio ácido-base, podrás interpretar resultados de forma rápida y segura, lo que es esencial en la práctica clínica de enfermería.
Aquí tienes una guía sencilla y directa para no perderte:
Es el proceso que mantiene el pH de la sangre dentro de un rango estrecho, entre 7.35 y 7.45, para asegurar el correcto funcionamiento de las células y órganos.
pH: Medida de la acidez o alcalinidad de una solución (en este caso, la sangre)
PaCO₂: Presión parcial de dióxido de carbono
HCO₃: Fórmula química del bicarbonato
PaO₂: Presión parcial de oxígeno
Sat. O₂: Saturación de oxígeno
Recuerda
Interpretar gasometrías no es memorizar fórmulas: es entender la lógica del cuerpo intentando mantener el equilibrio.
Con práctica, lo harás casi de forma automática.